En esta conversación Bobby Rio y Rob Judge hablan sobre el peligro de parecer “demasiado hambriento” con las chicas. Esta idea del hambre muestra cosas como desesperación, búsqueda de aprobación, e incluso la forma en la que te quedas mirando a las chicas sin darte cuenta.

 Hay muchas maneras de atraer a una chica, e incluso más maneras de matar inmediatamente esa atracción. Este video explica las formas más fáciles de hacer que una chica que alguna vez estaba interesada en ti pierda la atracción.

Lee esta conversación para aprender el mantra “Quienes lucen hambrientos nunca consiguen alimento”

Y así evitarás matar tus chances con las chicas.

 Conversación

Rob Judge:       Los hambrientos no consiguen alimento.

Bobby Rio:       Hola amigos. Soy Bobby Rio. Estoy con Rob Judge, y tenemos otro video para ustedes. En el video de hoy quiero transmitirles un poco de sabiduría, un pequeño mantra que alguien me pasó hace unos 13 años, y que me ha guiado en el mundo de las citas. Creo que es uno de los consejos para citas más potentes que hay, así que quiero que lo anoten. Ese pequeño mantra es “quienes lucen hambrientos nunca consiguen alimento”. Suena sencillo, permítanme explicarles lo que significa “lucir hambriento”.

“Hambriento” es un término que usamos para la desesperación. “Lucir hambriento” significa estar hambriento de aprobación de las mujeres, hambriento de sexo, hambriento de atención, hambriento de atracción femenina. Puedes detectar a los hombres así. Yo he sido ese hombre. Lo puedes detectar cada vez que sales.

Rob Judge:       Es algo que veo a menudo cuando salgo a un bar, o a un club, incluso cuando voy a un Starbucks. Puedes detectar en seguida al tipo que hace eso. Yo lo llamo “la mirada del violador”. El tipo está observando todo, y es tan obvio que el éxito de toda su noche depende de que alguna mujer los apruebe y les preste atención. Es ese tipo en el bar que sostiene su bebida y tiene un radar en la mirada. Está examinando el lugar, necesitando la aprobación de alguna chica. Es realmente patético, y casi que se puede ler la desesperación. Huele horrible. Simplemente provoca rechazo.

Bobby Rio:       Cuando mis amigos y yo descubrimos esto y comenzamos a seguir este mantra, salíamos y nos revisábamos todo el tiempo, pendientes de no parecer hambrientos. Entonces teníamos alguna conversación falsa para que la gente que nos estaba viendo no se diera cuenta de lo hambrientos que estábamos. Mucha gente piensa que no importa lucir hambriento si eres apuesto. Hay muchas cosas que te hacen lucir hambriento, como la forma en la que te quedas mirando a una chica. Tenía un amigo, Frank, con el que solía trabajar,

Frank era un tipo apuesto, realmente apuesto. Era un tipo agradable para conversar. Era gracioso, lo tenía todo, pero nunca conseguía una chica. Uno podía preguntarse “¿cómo es que este tipo no consigue una chica?” Pero cuando salías con él, te dabas cuenta de que estaba demasiado hambriento. Para dar algunos ejemplos, y quizás ustedes lo hayan hecho o no, pero presten atención igual. Cuando hablaba con alguna chica sobre otras mujeres, decía cosas como “¿Por qué a las chicas les gustan los imbéciles? ¿Por qué las chicas se van siempre con el imbécil en vez de salir con los tipos buenos?”

Cuando dices algo así, estás diciendo “No les gusto”. Y suena realmente desesperado. Otra cosa que Frank solía decir: digamos que entraba a trabajar con nosotros una chica nueva. Al presentarlos, a los diez minutos de conversación con la chica le preguntaba “¿Tienes alguna amiga? ¿Por qué no las traes?” Y ninguna chica querría traer a sus amigas para que conozcan a un tipo hambriento.

Rob Judge:       Frank es esa clase de tipo… si ustedes tienen en su Facebook alguna chica atractiva, cualquier chica atractiva que sube fotos suyas en las que luce sexy, Frank es el primer tipo que le pone “Me gusta”, y comenta cosas como “Eres hermosa, luces impresionante. Genial”. Estoy seguro, como les decía, que si tienen amigas atractivas en Facebook les revisan sus páginas y sus fotos. Ojalá no sean como esos tipos que publican esa clase de comentarios. Si lo son, deben detenerlo. Porque no saldrá nada bueno de eso. Ella no dirá “Guau, me está halagando así que debo tener sexo con él”. Ella verá el comentario y dirá “Guau, este tipo está realmente muy hambriento”.

Bobby Rio:       Deben tener cuidado, porque como dije, yo conocía este mantra. Sí, seguía siendo culpable, pero todos lo somos sin darnos cuenta. Recuerdo una fiesta en mi casa. Realmente quería que viniera una chica que me gustaba mucho. Finalmente vino, y nos pusimos a conversar. Estaba yendo todo bien, hasta que vino su amiga y le dijo que quería irse. Entonces ella me dice “Me tengo que ir”, a lo que yo le respondí “Quédate un poco más. Vamos, no tienes que irte. Te llevo a tu casa después”. Es algo muy desesperado, y demuestra tanto hambre y desesperación que termina alejándola. Existen todas estas formas casi imperceptibles, y ya se que mencionabas incluso antes de esta conversación, una de las formas que usabas.

Rob Judge:       Es sorprendente. Exactamente. Yo sentía lo mismo. Conocía el mantra. Cuando salía sabía que no debía lucir hambriento. Pero inconscientemente hacía cosas como espiarla. Cuando salía con una chica, me sorprendía haciendo cosas así. Estamos hablando, ordenando unos tragos, conversando en la barra. Y me doy cuenta de que tengo la mitad de mi cuerpo inclinado. Y me daba cuenta de que lucía muy poco atractivo, porque al ver a los demás tipos haciéndolo, podía ver que era evidente que estaban demasiado afectados. Un tipo que depende tanto de obtener la aprobación de la chica, que era casi como si se saliera de sí mismo. Y yo lo hacía. Es algo que tengo que recordarme constantemente, que hay que eliminar ese comportamiento hambriento, ese aspecto hambriento.

Bobby Rio:       Realmente deben prestar atención si están emanando una vibra hambrienta. Es interesante, que muchas veces los hombres se confunden porque una chica parece inicialmente atraída. Conocen una chica, salen juntos en un par de citas. Luego observan que la chica se retrae un poco, o deja de responder los mensajes de texto con la misma rapidez, o quizás te da menos pie a que sigas, o responde con monosílabos. Y puedes percibir que sucedió algo. Y te preguntas “¿Por qué? ¿Qué sucedió?” Casi puedo garantizar que ella percibió tu hambre.

A veces, las cosas que haces, Robbie, es como cuando le envías flores al trabajo, algo de lo que ya hablamos. Eso es algo que sale de la desesperación. Puede ser algo como enviar demasiados mensajes de texto, cosas como “Hey, ¿en qué andas? ¿Qué estás haciendo?” Es como si siempre estuvieras queriendo saber lo que hace. Y ella lo puede percibir, “¿me está vigilando? Parece demasiado afectado”. Quizás es que pareces demasiado disponible. Son muchas cosas distintas, y hay que estar alerta, porque las chicas tienen un radar para el hambre. Lo pueden oler.

No sólo lo huelen, sino que le temen tanto porque… Por una buena razón, y es que muchos tipos se vuelven demasiado desesperados. Demasiado inseguros. Así que las chicas quieren descartar a los tipos que son así, y por eso hacen pequeñas pruebas. Quizás es a nivel consciente, quizás sea inconsciente. Quizás simplemente ignoran alguno de tus mensajes de texto, y es para ver cómo respondes. Quieren saber qué tan hambriento estás. Son cosas que hacen, y debes estar alerta. La buena noticia es que si eres consciente de que las chicas prestan atención a los tipos hambrientos, lo puedes usar a tu favor. Y es que una característica muy atractiva es no lucir hambriento.

Cuando una chica conoce a un tipo que no parece para nada hambriento por atención o aprobación, entonces es ella la que se vuelve hambrienta, ¿verdad?

En esta conversación Bobby Rio y Rob Judge hablan sobre el peligro de parecer “demasiado hambriento” con las chicas. Esta idea del hambre muestra cosas como desesperación, búsqueda de aprobación, e incluso la forma en la que te quedas mirando a las chicas sin darte cuenta.

Hay muchas maneras de atraer a una chica, e incluso más maneras de matar inmediatamente esa atracción. Este video explica las formas más fáciles de hacer que una chica que alguna vez estaba interesada en ti pierda la atracción.

Lee esta conversación para aprender el mantra “Quienes lucen hambrientos nunca consiguen alimento”

Y evita matar tus chances con las chicas.

Conversación

Rob Judge:       Los hambrientos no consiguen alimento.

Bobby Rio:       Hola amigos. Soy Bobby Rio. Estoy con Rob Judge, y tenemos otro video para ustedes. En el video de hoy quiero transmitirles un poco de sabiduría, un pequeño mantra que alguien me pasó hace unos 13 años, y que me ha guiado en el mundo de las citas. Creo que es uno de los consejos para citas más potentes que hay, así que quiero que lo anoten. Ese pequeño mantra es “quienes lucen hambrientos nunca consiguen alimento”. Suena sencillo, permítanme explicarles lo que significa “lucir hambriento”.

“Hambriento” es un término que usamos para la desesperación. “Lucir hambriento” significa estar hambriento de aprobación de las mujeres, hambriento de sexo, hambriento de atención, hambriento de atracción femenina. Puedes detectar a los hombres así. Yo he sido ese hombre. Lo puedes detectar cada vez que sales.

Rob Judge:       Es algo que veo a menudo cuando salgo a un bar, o a un club, incluso cuando voy a un Starbucks. Puedes detectar en seguida al tipo que hace eso. Yo lo llamo “la mirada del violador”. El tipo está observando todo, y es tan obvio que el éxito de toda su noche depende de que alguna mujer los apruebe y les preste atención. Es ese tipo en el bar que sostiene su bebida y tiene un radar en la mirada. Está examinando el lugar, necesitando la aprobación de alguna chica. Es realmente patético, y casi que se puede ler la desesperación. Huele horrible. Simplemente provoca rechazo.

Bobby Rio:       Cuando mis amigos y yo descubrimos esto y comenzamos a seguir este mantra, salíamos y nos revisábamos todo el tiempo, pendientes de no parecer hambrientos. Entonces teníamos alguna conversación falsa para que la gente que nos estaba viendo no se diera cuenta de lo hambrientos que estábamos. Mucha gente piensa que no importa lucir hambriento si eres apuesto. Hay muchas cosas que te hacen lucir hambriento, como la forma en la que te quedas mirando a una chica. Tenía un amigo, Frank, con el que solía trabajar,

Frank era un tipo apuesto, realmente apuesto. Era un tipo agradable para conversar. Era gracioso, lo tenía todo, pero nunca conseguía una chica. Uno podía preguntarse “¿cómo es que este tipo no consigue una chica?” Pero cuando salías con él, te dabas cuenta de que estaba demasiado hambriento. Para dar algunos ejemplos, y quizás ustedes lo hayan hecho o no, pero presten atención igual. Cuando hablaba con alguna chica sobre otras mujeres, decía cosas como “¿Por qué a las chicas les gustan los imbéciles? ¿Por qué las chicas se van siempre con el imbécil en vez de salir con los tipos buenos?”

Cuando dices algo así, estás diciendo “No les gusto”. Y suena realmente desesperado. Otra cosa que Frank solía decir: digamos que entraba a trabajar con nosotros una chica nueva. Al presentarlos, a los diez minutos de conversación con la chica le preguntaba “¿Tienes alguna amiga? ¿Por qué no las traes?” Y ninguna chica querría traer a sus amigas para que conozcan a un tipo hambriento.

Rob Judge:       Frank es esa clase de tipo… si ustedes tienen en su Facebook alguna chica atractiva, cualquier chica atractiva que sube fotos suyas en las que luce sexy, Frank es el primer tipo que le pone “Me gusta”, y comenta cosas como “Eres hermosa, luces impresionante. Genial”. Estoy seguro, como les decía, que si tienen amigas atractivas en Facebook les revisan sus páginas y sus fotos. Ojalá no sean como esos tipos que publican esa clase de comentarios. Si lo son, deben detenerlo. Porque no saldrá nada bueno de eso. Ella no dirá “Guau, me está halagando así que debo tener sexo con él”. Ella verá el comentario y dirá “Guau, este tipo está realmente muy hambriento”.

Bobby Rio:       Deben tener cuidado, porque como dije, yo conocía este mantra. Sí, seguía siendo culpable, pero todos lo somos sin darnos cuenta. Recuerdo una fiesta en mi casa. Realmente quería que viniera una chica que me gustaba mucho. Finalmente vino, y nos pusimos a conversar. Estaba yendo todo bien, hasta que vino su amiga y le dijo que quería irse. Entonces ella me dice “Me tengo que ir”, a lo que yo le respondí “Quédate un poco más. Vamos, no tienes que irte. Te llevo a tu casa después”. Es algo muy desesperado, y demuestra tanto hambre y desesperación que termina alejándola. Existen todas estas formas casi imperceptibles, y ya se que mencionabas incluso antes de esta conversación, una de las formas que usabas.

Rob Judge:       Es sorprendente. Exactamente. Yo sentía lo mismo. Conocía el mantra. Cuando salía sabía que no debía lucir hambriento. Pero inconscientemente hacía cosas como espiarla. Cuando salía con una chica, me sorprendía haciendo cosas así. Estamos hablando, ordenando unos tragos, conversando en la barra. Y me doy cuenta de que tengo la mitad de mi cuerpo inclinado. Y me daba cuenta de que lucía muy poco atractivo, porque al ver a los demás tipos haciéndolo, podía ver que era evidente que estaban demasiado afectados. Un tipo que depende tanto de obtener la aprobación de la chica, que era casi como si se saliera de sí mismo. Y yo lo hacía. Es algo que tengo que recordarme constantemente, que hay que eliminar ese comportamiento hambriento, ese aspecto hambriento.

Bobby Rio:       Realmente deben prestar atención si están emanando una vibra hambrienta. Es interesante, que muchas veces los hombres se confunden porque una chica parece inicialmente atraída. Conocen una chica, salen juntos en un par de citas Luego observan que la chica se retrae un poco, o deja de responder los mensajes de texto con la misma rapidez, o quizás te da menos pie a que sigas, o responde con monosílabos. Y puedes percibir que sucedió algo. Y te preguntas “¿Por qué? ¿Qué sucedió?” Casi puedo garantizar que ella percibió tu hambre.

A veces, las cosas que haces, Robbie, es como cuando le envías flores al trabajo, algo de lo que ya hablamos. Eso es algo que sale de la desesperación. Puede ser algo como enviar demasiados mensajes de texto, cosas como “Hey, ¿en qué andas? ¿Qué estás haciendo?” Es como si siempre estuvieras queriendo saber lo que hace. Y ella lo puede percibir, “¿me está vigilando? Parece demasiado afectado”. Quizás es que pareces demasiado disponible. Son muchas cosas distintas, y hay que estar alerta, porque las chicas tienen un radar para el hambre. Lo pueden oler.

No sólo lo huelen, sino que le temen tanto porque… Por una buena razón, y es que muchos tipos se vuelven demasiado desesperados. Demasiado inseguros. Así que las chicas quieren descartar a los tipos que son así, y por eso hacen pequeñas pruebas. Quizás es a nivel consciente, quizás sea inconsciente. Quizás simplemente ignoran alguno de tus mensajes de texto, y es para ver cómo respondes. Quieren saber qué tan hambriento estás. Son cosas que hacen, y debes estar alerta. La buena noticia es que si eres consciente de que las chicas prestan atención a los tipos hambrientos, lo puedes usar a tu favor. Y es que una característica muy atractiva es no lucir hambriento.

Cuando una chica conoce a un tipo que no parece para nada hambriento por atención o aprobación, entonces es ella la que se vuelve hambrienta, ¿verdad?