Cuando Ella Se Enfada Contigo
Lo admites: hiciste algo mal. O quizás creas que ella está exagerando. Ya sea que te responsabilices o no, aquí tienes cómo evitar que tu novia se enfade contigo.
Descubre cuál es el problema
Es importante saber por qué se enfadó. No sólo para evitar el problema en el futuro, por más útil que sea. También para que ella sepa que tomas en serio sus preocupaciones, lo suficiente como para comprender cuál es el problema. La única manera de descubrir cuál es el problema es preguntando. Quizás creas que ya sabes por qué, pero pregunta de todas maneras. Es importante por dos motivos. Primero, si es un problema completamente distinto, podrías terminar saltando frente al cañón y disculpándote por algo que creías haber hecho mal, llamándole la atención sobre otro problema distinto. Segundo, incluso si ya sabes cuál es el problema, tal vez no sepas por qué lo es. A menudo, las mujeres se enfadan por lo que parecería ser un pequeño incidente, pero que resulta ser la gota que rebalsa el vaso. Por ejemplo, quizás está molesta contigo porque olvidaste llamarla cuando habías dicho que lo harías. En sí mismo no es un problema, pero tal vez se enfada contigo porque siempre te olvidas de ella. Debes ser muy claro sobre cuál es el problema, y preguntarle si ése es el problema real o si es parte de un problema más general.
No te disculpes
Reserva las disculpas para cuando la hayas fregado en serio. Es importante que aprendas a disculparte, y una parte importante es saber que no toda situación requiere una disculpa. Decir lo siento todo el tiempo termina diluyendo el significado de la disculpa. Antes que disculparte como acto reflejo, pregúntale qué podrías hacer para reparar la situación. Así la alentarás a que se involucre con el problema, en vez de quejarse y dejártelo para que veas qué hacer. No sólo funciona para disminuir su enfado en ese momento, sino que también te ayudará en caso de que continúes.
Discutir el asunto también es mejor que disculparse, ya que así estarías sometiéndote y dándole todo el poder a ella.
No ignores el problema
Ella no se olvidará del problema sólo porque te rehúses a hablar de ello. Quizás te lo deje pasar esta vez, pero la próxima vez que se enfade contigo volverá a tomar el problema anterior. Todo el tiempo en el medio habrá estado acumulando ira, convenciéndose cada vez más de que su enfado está justificado. Por supuesto, al rehusarte a lidiar con los problemas, le estás dando un muy buen motivo para que se enfade. Puede resultar frustrante, pero necesitas discutir exhaustivamente el problema. No tiene sentido esperar hasta que se calme, porque se volverá a alterar la próxima vez que surja el problema. Discútelo lo antes posible para desactivar la situación.